El pasado domingo 10 de septiembre, el Partido Solidario distrito Tucumán, participó del homenaje a Isauro Arancibia en el cementerio del norte de la ciudad de Monteros. Con la presencia de familiares, docentes y autoridades gremiales, miembros de nuestro partido se hicieron presente en la ciudad del interior tucumano para entregar una humilde pero sentida placa conmemorativa a los familiares.
¿Quién fue Isauro Arancibia?
Fue un maestro rural y dirigente sindical, quien llegó a estar a la cabeza de ATEP (Agremiación de Trabajadores de la Educación Provincial) desde donde trabajó además por la unión de todos los gremios. Impulsor del proceso que llevaría a la fundación de CTERA (Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina) en la cual desempeñó el cargo de Secretario General Adjunto.
Participó en las huelgas del 58, en la cual se reclamaba por el Estatuto Docente. En ellas también se exigió la enseñanza laica y libre, y la equiparación salarial de los maestros provinciales con los nacionales. Siempre fue un acérrimo impulsor de la mejora de la legislación en la educación, lo que conllevaba necesariamente la mejora de los derechos laborales de los docentes, lográndose conquistas como la Bonificación por Antigüedad, por Zona, Régimen de Licencias y la creación de las Juntas de clasificación con participación docente.
En la madrugada lluviosa del 24 de marzo del 1976 -horas antes de que cumpliera sus 50 años- un grupo de tareas cívico-militar dá muerte a Isauro y Arturo (su hermano) en el local de ATEP donde ellos residían. El libro "La oruga sobre el pizarrón" -de Eduardo Rosenzvaig- dá cuenta de esa noche, donde detalla la irónica acta policial librada con errores ortográficos y gramaticales, el robo de sus zapatos y la escena macabra al depositar más de 120 balazos en el cuerpo de Isauro.
Construir y participar solidariamente en la memoria.
Ante la toma de conocimiento del homenaje, el Partido Solidario distrito Tucumán no dudo en hacerse presente y homenajear al docente. En una mañana lluviosa de domingo, miembros del partido se apersonaron y le entregaron a la hermana una placa en la cual rezan las siguientes palabras:
No fue tu apellido.
No fue tu persona.
No fueron tus zapatos.
No fue tu bicicleta.
Representabas el "exceso" de pensamiento. La "desviación" en la mente de los jóvenes. Motivabas aquello que los de arriba no querían.
Representabas la lucha, el reconocimiento de derechos, la antítesis del modelo de "persona educada" buscado por un Estado represor.
Representabas la corrección ortográfica y justiciera de un acta policial que faltó a la clase de gramática.
Representabas un gremio. Una idea. Un dormitorio que paso a ser un matadero en el cual te "extinguieron" horas antes de llegar a tu mitad de siglo de existencia.
Representabas el inicio de una larga lista de lágrimas. De reclamos.
No fuiste uno, fuiste 30000.
